REVISIÓN DEL RÉGIMEN DE VISITAS
El régimen de visitas no es tanto un derecho como una obligación que recae en los progenitores, el cual va orientado a que los menores tengas sus necesidades emocionales y afectivas cubiertas.
Se habla mucho del derecho de los padres pero, y los hijos, ¿cómo sufren las consecuencias cuando sus progenitores no llegan a acuerdos en el régimen de visitas?
Existen muchos casos en los que alguno de los progenitores olvida temporalmente las necesidades del menor y se centran, o bien en su satisfacción personal o bien en el generar molestia o malestar al otro progenitor.
En este tipo de situaciones, los detectives privados recomendamos, calma y cordura. Si se considera que el régimen de visitas es claramente desigual en favor de uno de los dos adultos es conveniente que se revisen las condiciones.
Ahora bien, en algunos casos, se solicita una serie de exigencias que posteriormente no se pueden llevar a cabo. El caso práctico más claro que podemos exponer como profesionales de la investigación privada es el siguiente:
- Un padre o madre va a buscar dos tardes a la semana a su hijo menor al colegio. Pasa la tarde con él y, al día siguiente, es ese progenitor quién lleva al colegio al menor. Pues bien, puede darse el caso de que este padre o madre no sea capaz de afrontar con garantías las necesidades del niño durante esa franja horaria. Bien porque su jornada laboral finalice una vez pasada la hora de recogida del menor o por cualquier otro motivo.
En este breve caso expuesto, se aprecia fácilmente la incapacidad de ese progenitor para cumplir como debe con sus obligaciones. Mediante la aportación de pruebas obtenidas por detectives privados debidamente habilitados se puede conseguir modificar el régimen de visitas, siempre enfocado a mejorar el crecimiento del menor.
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